La Perra Verde ni se crea ni se destruye, sólo se transforma.
En el principio de los tiempos, estaba la nada y luego estuvo La Perra Verde.
A lo largo de su vida, Perra ha vivido innumerables aventuras en exóticos y pocos conocidos países, ha conocido a grandes personalidades y ha hecho grandes gestas, las cuales pasaremos a narrarles ahora.
Después de abandonar a Nikola Tesla por parecerle un pusilánime al no defender las patentes de sus inventos, viajó por diversos países sudamericanos.
Estando en Buenos Aires conoció a un joven y aún desconocido Ernesto Guevara, el sobrenombre de Che se lo puso cuando ella dijo varias veces esa expresión valenciana, la cual le hizo gracia.
Estando de risas, ella le hizo una foto, pero perdió la cámara, tiempo después un tal Alberto Korda, que había encontrado la cámara, se hizo con la autoría de la misma.
Ha rechazado en diversas ocasiones el premio Nobel para en su magnificencia, dejar que otros investigadores desconocidos alcanzasen cierta notoriedad y tuvieran gracias al premio, ayudas para sus investigaciones.
Pero no todo en su vida han sido viajes o investigación, durante un tiempo se dedico al Nu Metal junto al grupo Slipknot, les eligió por llevar siempre máscaras en sus conciertos. Ella podía liberar toda su adrenalina e instintos primarios, pero conservando el anonimato. Abandonó el grupo cuando decidieron hacerse fotos para promoción sin las máscaras. Fue un momento triste, pero todos quedaron como grandes amigos.
Después de tener una época un tanto convulsa en cuanto a alcohol y drogas junto a Ozzy Osbourne, Janis Joplin, Johnn y Yoko o Keith Richards, a los cuales conoció en sus años musicales.
Decidió purificar su cuerpo en el Tibet el día que se levantó con 2 hombres, la señora de la limpieza y un gatito persa, todos juntos y revueltos sin llegar nunca a recordar como se había producido esa situación.
En el Tibet le dijeron que sin duda, era la nueva reencarnación del Dalai Lama, pero no estaba dispuesta a raparse el pelo o a dedicar su vida a la meditación y la vida sana. Una cosa era despertarse en un sitio que no conocía rodeada de gente desnuda y cuero, y otra era llegar al extremo de llevar una vida saludable.
Por lo cual, después de un merecido y reparador descanso, ella misma eligió a su sucesor.
Como su cuerpo ya estaba purificado, decidió dejar que no se oxidara empezando a beber vino, ya que había visto en un estudio que era bueno para el corazón. Pasó varios meses en la mansión de Ángela Channing, gran señora donde las haya, buena y respetuosa persona, pero habían ciertos problemas con el resto de su familia y como aquello empezó a parecerse a un culebrón, después de recibir su peso en vino, decidió partir hacia Afganistan, donde le habían dicho que habían unos Budas tallados en la roca impresionantes y amapolas cada 3 metros. Allí si que no aguantó ni media hora.
De vuelta en España, se unió al Grupo Bilderberg y en el sigue, manejando el destino de España, Europa y el mundo en general.
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